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Conexión

  • Foto del escritor: Danuvis L. Samaniego
    Danuvis L. Samaniego
  • 6 feb 2018
  • 2 Min. de lectura

Actualizado: 10 abr 2018

Estamos continuamente conectados, la pregunta es: ¿Con qué?

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Antes de iniciar con este artículo, te invito a que te hagas las siguientes preguntas: ¿Saludaste hoy a algún desconocido? ¿A cuántos regalaste una sonrisa?


… y si te pido que reflexiones, ¿Miras a los ojos y sonríes a esa persona especial que ves todos los días antes de salir de casa?



La dualidad en la que vivimos nos lleva a estar en una balanza de conexión y desconexión constante. Se está más “en línea” gracias a la tecnología, pero menos “conectados” con el aquí y el ahora - con nuestro entorno.


Desde mi perspectiva la tecnología es increíble, si le damos un uso controlado; en lugar dejarnos llevar por la corriente y permitir que sea ésta la que controle nuestras vidas.

Es fundamental empezar a tomar conciencia del HOY y darnos la oportunidad de “CONECTAR” realmente con nuestra familia, amigos, clientes, conocidos o desconocidos a quienes les podemos brindar o por el contrario, de quienes podríamos recibir ese calor humano, esa experiencia, esas oportunidades de compartir y alimentarnos desde nuestra esencia.


Estarán de acuerdo conmigo, si les digo que en más de una ocasión al subir a un ascensor las mascotas parecen notar más la presencia de un ser humano, que sus propios amos, quienes si bien ocupan un espacio físico – viven mentalmente en otro lugar.


Cuántos se han sentido un poco extraterrestres al decir “Buenos Días” y recibir por respuesta un largoooo silencio; es allí donde decimos ¡vaya no saludo más! (y entramos en el círculo de la desconexión) o en el mejor de los casos nos preguntamos - ¿acaso soy yo el que estoy mal? ¡EN LO ABSOLUTO!

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Te invito a que te retes a ti mismo y hagas un Detox de TI – dispón de espacios del día sin tecnología y dedícate realmente compartir, mirar a los ojos, sonreír, escuchar, abrazar, dar palabras de apoyo – quejarte menos y disfrutar más; en tu casa, en tu trabajo y en tu vida diaria, en resumen: permítete dar una versión real y mejorada cada día.





“Sonreír es gratis”… vaya que sí lo es y cómo marca una diferencia.


Con cariño,


Danuvis

D-Quality Group


 
 
 

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